lunes, 31 de diciembre de 2007

"Aprendiendo"

de Jorge Luís Borges.

Después de un tiempo uno aprende la sutil diferencia entre sostener una mano y encadenar un alma y uno aprende que el amor no significa acostarse y una compañía no significa seguridad. Y uno empieza a aprender que los besos no son contratos, y los regalos no son promesas. Y uno empieza a aceptar sus derrotas con la cabeza alta y los ojos abiertos. Y uno empieza a construir todos sus caminos en el hoy porque el terreno del mañana es demasiado inseguro para planes... y los futuros tienden a caerse en la mitad. Y después de un tiempo uno aprende que, si es demasiado, hasta el calor del sol quema. Así que uno planta su propio jardín y decora su propia alma en lugar de esperar que alguien le traiga flores. Y uno aprende que realmente puede aguantar. Que uno realmente es fuerte, que uno realmente vale, y uno aprende y aprende... Y con cada día uno aprende.
Feliz año nuevo. Toca seguir aprendiendo.

jueves, 20 de diciembre de 2007

Indignación es poco...

... para definir lo que he sentido viendo esta noche la gala de "Papito" de la Primera, la televisión de todos los españoles. Ala, y se quedan tan anchos. Gracias a Dios yo soy de las de El Internado, no sólo por ver cumplido un sueño infantil sino por ponerme púa de ver tíos en camisetas de tirantes cuando se supone que el colegio está perdido en la montaña y es invierno. Me encanta la trama, el miedecito, los diálogos, los personajes, la hija de Lolita haciendo de hija de frutera, la Torné de chacha, Luis Merlo de hetero y los gorros verdugo de la niña, que son lo más cool esta temporada. Te lo digo yo que el Vogue me lo estudio. Me encanta, en serio. Lo digo para los que no pilléis mi humor.


A los que íbamos. Que gracias a Dios que este penúltimo capítulo de la temporada sólo me ha dejado ver al papito a ratos entre la publi porque... ¡pa' morirse! Señores, ¿qué cantidad indecente de dinero habrán pagado a ese hombre por estar to-da-la-san-ta no-che haciendo playback? una verguenza. Mira la Jurado, medio muriéndose y dejándose la voz en el escenario. Sí, señor. Con las botas puestas. Pero este no. A este nos lo venden como prototipo del macho ibérico y cada día lo parece más, pero de los de sofá y cerveza, ojito a la barriga que me gasta. Es lo que pasa cuando dejas las drogas, que engordas. Tambien nos entretienen divagando sobre su ambigüedad. Que a mi me da igual lo que haga, pero que cante, coño, que cante. Y, para más inri, ahí tenemos a Pepa Bueno, que no tiene más registros que el de Los Desayunos de TVE, a Antonio Vega actuando (en playback) sentado en un sofá porque no se tienen en pie y a Bimba (si esa es modelo, yo me hago un book mañana) y sus hormigas y su chepa subidas en unos tacones de 15 cm que no le permiten ponerse derecha en un final apoteósico, en playback, de autobombo y prepromoción de su disco de ella, que dirían las abuelas.

Es un momento de la actuacion en la gala. Aquí no se le ve la barriga, he sido buena

lunes, 17 de diciembre de 2007

Ole, ole y ole

(Pronunciado Ole, no olé) para dos anuncios que me cautivaron desde la primera vez que los vi. El primero por esa inconfundible voz que lee o, mejor dicho, recita, un precioso texto mejor que nadie y que le da al anuncio una clase y una categoría únicas. Estábamos en el salón de la casa de una tía mía un montón de gente charlando y cuando empezó el anuncio todos nos callamos y nos fijamos en la tele con los ojos como platos y el vello de punta. "¡Qué bonito!" creo que fue lo siguiente que se oyó antes de que dejáramos de prestarle atención al Don Limpio y a las power balls. O quizá era un perfume, no me acuerdo.

Para los curiosos como yo, la poesia original se llama "If" (original en inglés)
y la escribió un Nobel, Rudyard Kipling.

El segundo porque, sin duda, es un anuncio para mujeres al igual que los de Axe lo son para hombres. Bien por los creativos que lo imaginaron y fueron capaces de hacerlo realidad. Estábamos hace un par de años en el salón de uno de mis muchos pisos de estudiantes y mis dos compañeras y yo lo miramos y fue algo así como "guuuuaaaa, que morbazo..." No he encontrado el vídeo en el, ahora un poco menos, omnipotente youtube (desde aquí hago un llamamiento: si alguien puede, que lo cuelgue) pero me refiero al anuncio de Barceló Cream. Ya sabéis, "Despacio". Sencillamente genial. Apela, alude e hipnotiza a su público objetivo y nos pone en bandeja 20' para relajarnos y dejar volar la imaginación. Al primer anuncio de la goma del pelo bajando tan despacio que casi parece que te la están quitando a ti se ha unido ahora el de la mano rodeando la cintura que me gusta, si cabe, aún más. Seamos sinceras: TODAS queremos ser la protagonista del anuncio.
Sólo puedo ofrecer el enlace de una página en la que lo reproducen. A disfrutar, chicas.
Y este es el de esta navidad:


lunes, 26 de noviembre de 2007

Love Actually

Hoy la he visto otra vez gracias a TVE y, definitivamente, me encanta el cine británico. Al menos, todo el que he visto. Y a mí sí me hace gracia su humor, pese a los que puedan tacharme de cultureta.
Y aquí estoy yo, preparando ansiosa mi breve viaje a Londres de diciembre, planeando en una lista que crece cada día all the things i wanna do. Y van y me ponen esa película, con esos planos increíbles de los puentes del Támesis con St. Paul de fondo. Y esas calles inmensas de casas todas iguales con sus tres escalones en la puerta. Y me muero por ir. Me muero por vivir allí. Me muero de ganas por convertirme en cualquiera de las mujeres de la película y vivir en uno de esos áticos diminutos y encantadores decorados con mucho gusto y poco dinero. Y sé que lo haré algún día. No sé cuando, no sé cómo. Pero lo haré.
Londres es mi ciudad. Aunque sólo he estado una vez (vi lo mínimo e indispensable) y no se puede decir que haya visto el mundo entero (ni medio siquiera) sentí desde que la vi que era mi ciudad. En diciembre será la segunda vez que la pise y, entre tú y yo, quiero hacer de esto un hábito. Es muy snob, lo sé, pero a partir de ahora quiero ir allí con asiduidad. Así como, al menos, una vez al año. No por nada. Por el simple placer de estar allí. No me importan las tiendas cerradas a las 5, las calles vacías a las 5’30 y el insuficiente alumbrado publico. La adoro. Supongo que el amor será algo así, aún no lo sé. Conocer a alguien y sentir que tienes que estar lo más cerca posible de él todo el tiempo que puedas, disfrutar cada momento a su lado. Planear con esperanza y deseo los momentos en los que os veréis. Es algo así, ¿no? Creo que me estoy enamorando. Ya os contaré que tal nuestro idilio cuando vuelva.



jueves, 22 de noviembre de 2007

¿Me cambias una poliomelitis por un VIH?

Estando recostada en el sofá digiriendo la comida el otro día vi un reportaje en el telediario sobre los “juguetes de estas Navidades” (¿soy la única a la que le crispa los nervios que las Navidades empiecen el 20 de noviembre?) y, cual fue mi sorpresa cuando un trajeado ejecutivo de compañía juguetera sonríe a cámara explicando las nuevas creaciones y lanzamientos para estas fechas tan señaladas y entrañables: peluches más bien pequeños de vivos colores… ¡¡CON LAS FORMAS DE LOS VIRUS MÁS CONOCIDOS!! Me froto los ojos. No puedo haber entendido bien. Los kiwis y el pollo a la plancha de la comida me deben estar jugando una mala pasada. Pero no. Ahí está. Eso rosa, azul y amarillo no es una arañita impresionista. ¡Es el dengue! ¡¡Y además son coleccionables!! Esto es lo último.

Todo con un trasfondo educativo y pedagógico, claro está, que es lo que vende ahora. Nada más importante para un niño que juega con peluches que reconocer de un vistazo el virus de la fiebre amarilla. Muy didáctico. Porque los juguetes tienen que entretener y educar. Y tener bonitos diseños y no ser sexistas. Y las galletas tienen que ser nutritivas y divertidas. Esto es de sentido común. Cualquiera lo sabe.
En fin, que siempre que pienso que está todo inventado a alguna lumbrera se le ocurre algo como esto. Ya estoy deseando ver que nuevas maravillas nos preparan para las próximas Navidades. Sólo habrá que esperar al septiembre próximo.



Y los venden, por mi vida. Si alguien está interesado puede dar una vuelta por la web http://planetapluton.com/giant-microbes-p-33.html

miércoles, 21 de noviembre de 2007

El Principito

Cuando estaba pensando en este post antes de ponerme a teclear he pensado que, en realidad, tirando del hilo podría hablar de muchas cosas hoy. Podría decir que los libros “para pensar” son una de las muchas cosas que me gustan pero que, realmente, no necesito. Podría disertar sobre lo mucho que gusta en los colegios dar a leer “El Principito” en la primaria cuando, realmente, es un libro para adultos con el que puedes replantearte tu vida de arriba abajo un par de veces en cada página. Podría también rememorar viejos tiempos en campamentos y acampadas con la compañía de esos textos. Y muchas otras cosas. Sin embargo, hablaré de la belleza per se, a la luz de este trocito del libro:
(He leído varias traducciones con matices diferentes, pero…)

¡Ah, Principito! Así comprendí poco a poco tu pequeña vida melancólica. Tu única distracción durante mucho tiempo fue la dulzura de los atardeceres. Me enteré de este nuevo detalle en la mañana del cuarto día, cuando me dijiste:
- me gustan mucho las puestas de sol. Vamos a ver una puesta de sol…
- pero tenemos que esperar
- ¿Esperar a qué?
- A que el sol se ponga (…)

En tu pequeño planeta bastaba con mover tu silla unos pasos para poder contemplar el crepúsculo cada vez que lo deseabas…
- ¡Un día vi al sol ocultarse cuarenta y tres veces!

Poco después agregaste:
- Sabes, a uno le gustan los atardeceres cuando se siente verdaderamente triste
- El día de los cuarenta y tres atardeceres, ¿estabas en verdad triste?
El principito no contestó.

No todo en la vida tiene que tener un superfondo. Hay veces que algo nos gusta porque sí. A mí me gustan los atardeceres porque son bonitos. Son bellos. No tengo que sentarme en un risco a mirarlos y olvidarme de que existe un mundo. Hay canciones que me gustan pero no me recuerdan a nadie, hay vestidos de los que me enamoro sin pensar en cuando me los pondré, hay ficciones que me emocionan.
Es pura estética. Simplemente miro y me deleito. Sólo muy de vez en cuando siento algo lejanamente parecido al Principito. Sólo a veces un atardecer es una excusa para reflexionar profundamente. Me encantan.



En alguna de parte de Mallorca, hace poco

PD: "No se ve bien sino con el corazón. Lo esencial es invisible a los ojos"

lunes, 19 de noviembre de 2007

Si me queréis algo, irse

Llevo bastante tiempo intentado escribir algún otro post, lo prometo. Pero no sé porqué la conexión de mi casa, y el ordenador de mi cuarto en particular, han estado impidiéndomelo con energía. Al fin he conseguido doblegarlos y aquí estoy. Acabo de recibir un mensaje multimedia de alguien a quien cada día me siento más conectada y ha sido una de las ilusiones más tremendas de esta última época. Es un archivo de audio, que inmediatamente ha pasado a ser mi tono de llamadas en el móvil, con las palabras de la gran Lola el día de la boda de su hija. A saber:



Y, por si a alguien le queda alguna duda, a Ella (sí, en mayúsculas, como Faraona y Reina que fue y será) es a quien debo el nombre de mi blog. ¿Por qué? Simplemente porque me encanta la frase. Me parece una de las muchas perlas con las que Lola nos obsequió durante su vida. Muchas de ellas, como la que le he tomado prestada para este hijo mío, pertenecen ya al conjunto de dicho populares ¿Puede haber más prueba de grandeza? Sin duda, una de las grandes mujeres, de los grandes temperamentos, de las últimas décadas. ¿Que me decís de eso de "Íñigo, por favor, que el pendiente no lo quiero perder"? O aquello aún más grande, si cabe, que "con que cada español ponga una pesetita podría pagar lo que ustedes dicen que debo a Hacienda". Si llevara sombrero me descubriría. No entro, Dios me libre, a juzgarla en lo personal. Además no podría puesto que la idolatro y, como persona que se dedica a esto del artisteo, ya lo dijo aquel crítico del New York Times hace casi 50 años: "ni baila como una gran bailadora, ni canta como una gran cantaora, pero no se la pierdan”. Lo dicho, señores, ¡¡¡que viva Lola Flores!!!!

martes, 23 de octubre de 2007

Es lo que hay

Y ya está... ¿que le voy a hacer? no me gusta hablar con gente que no conozco. No, eso no es cierto. Me encanta hablar con gente, da igual conocerlas o no. Me encanta la gente. Rectifico: no me gusta hablar con tíos que no conozco en las discotecas y sitios por el estilo. Sí. Eso es exactamente. Lo siento pero no me gusta. Uno de mis muchos prejuicios es que creo que no voy a encontrar a nadie interesante en un lugar así. Todos me parecen buitres a la caza y captura de presa comestible. Si un tío al que no conozco de nada me intenta dar conversación en una discoteca le contesto, eso sí, educación ante todo, pero corto por lo sano. Ni le doy conversación, ni mucho menos le sigo el rollo ni, ¡oh, horror! acepto la mano que me tiende para bailar con él. Sé que muchos podrían ponerme mil objeciones. No os molestéis. Ya lo hago yo sola, pero, a ver, es un prejuicio como otro cualquiera. De hecho, a mi también se me valora cuando se me conoce pero con un desconocido ebrio (o sobrio) a ritmo de pachangueo nunca me parece ni el momento ni el lugar.
Además, seamos sinceros, ¿quien da una buena primera impresión en un bareto? En medio de música que normalmente está demasiado alta lo cual te pone en dos situaciones, no sé cual peor: no escuchar/entender absolutamente nada de lo que alguien te dice o que el susodicho, intentando hacerse entender y, ya de paso, darse un alegría pal cuerpo, te agarre por la cintura como en el mejor lance de sevillanas y te acerque tanto la boca a la oreja que cuando la despega tienes que darte un restregón con los dedos en un vano intento de sacarte de ahí el pitido que te acompañará el resto de la noche.

Por no hablar de las primeras frases que se dicen para romper el hielo... Por eso me encanta esa camiseta. Me da exactamente igual parecer una borde / mogigata / amargada / asocial porque sé perfectamente que no lo soy. Ya estoy en trámites para hacerme con una...



Para los que, como yo, veis menos que un gato de escayola, os transcribo: "No tengo fuego. No estudio ni trabajo. No nos hemos visto antes. No estoy sola"

viernes, 5 de octubre de 2007

La peor presentadora de la tv

Esta entrada nació como mail a mi amigo Javi y ahora se ha convertido en esto...
¡Grande! El pasado lunes nuestra querida amiga Judith Mascó estuvo más grande que nunca. Y cuando digo grande sé que, tú que me conoces a mí y a mi sentido del humor, entiendes perfectamente que me refiero a triste. A sus fruncidos de labios, levantamientos de ceja y apuntes con el índice, a los que, por otra parte, ya nos tiene bien acostumbrados, añadió en esa gala, esperemos que sólo fuera la primera vez de una larga lista, unas cuantas frases que pretendían ser chistosas pero que, en sus fruncidos labios, quedan anodinas y hasta antipáticas. Cuanto guionista frustrado debe haber en Cuatro... Para muestra, por no reproducir textualmente TODA la gala, que no tengo ganas, diré que el invitado del programa para sentarse con ese elenco de grandes profesionales que componen el jurado de Supermodelo 2007 (merecen entrada a parte) fue Andrés Velencoso, un supermodelo español de los pocos que pertenecen al Olimpo del momento.

Atención a la conversación:

Judit Mascó: ... es un honor recibir a Andrés Velencoso!! (aplausos a golpe de regidor)
Andrés Velencoso: Hola. Buenas Noches.
J.M: Cómo estás, Andrés
A.V: gracias por invitarme, es un honor
J.M: no era una pregunta, era una afirmación

¡¡Pero por Dios, Judit!! Quizá con el estrés de ver a las niñas intentando poner caras plausibles en la pasarela y de escuchar a Vicky Martín Berrocal intentando decir algo coherente no te has dado cuenta de que:
A.- él no te ha respondido a la pregunta
B.- la gracia, por consiguiente, ya no entra. No la metas con cuña.
C.- toda tú no tienes gracia. Explota tu físico y no tu chispa. (te lo digo como amiga...)

En fín. Un programa más para mi lista, pelín sado, de "no me lo pierdo nunca pero porque odio a la presentadora y me encanta verla en acción, a ver cuando la caga". Le hace compañía en la lista a Gran Hermano.


Andrés Velencoso. Guapo... lo que se dice guapo... es!!!!

sábado, 1 de septiembre de 2007

jueves, 23 de agosto de 2007

Alejandro Dumas o cómo leer entre líneas

Aunque, pensándolo bien, no es en absoluto necesario leer entre líneas para darse cuenta de que "Los Dos Estudiantes" es el relato más gay de la historia de la literatura. Al menos de los que yo conozco. Toda una declaración de intenciones entre dos jóvenes amigos que se tienen por hermanos. De sutileza, nada. De tapadillo y disfraz de amistad varonil sincera, todo.
Leedlo y ya me diréis.

martes, 14 de agosto de 2007

Manuela Trasobares o "a quien le importan los informativos cuando una mezzosoprano travesti canta en D.E.C."

Me encantan los frikis. Ea. Ya esta. Ya lo he dicho. Lo admito. Lo confieso casi con un ápice de orgullo. Esta especie me entretiene. me hacen reír. Me abochornan. Me recuerdan la teoría de la evolución y que cada cual tiene su lugar en el mundo. Me suben la moral. Me hacen sentir inteligente, responsable, digna. Hacen que mi vida anónima tenga sentido y que desaparezcan las pocas ganas que ya de por mi misma tengo de cualquier notoriedad publica.
Sigo sus carreras. Los busca si desaparecen. Pregunto por ellos a familiares y conocidos. Los imito. Hago mías sus frases y las uso en el día a día. Ese día a día que es mas reconfortante si de repente me los encuentro sin querer haciendo zapping.

Y es que adoro a la gente que intenta hacer ver a los demás que se toma en serio. Gente que se sabe inepta, sin aptitudes para nada que valga la pena intentar e indefensa pero no por ello dispuestos a renunciar a tener la vida que quieren y a que el resto del mundo lo sepa, lo vea, y se revuelva en su tumba. Hacen del minuto de gloria al que todo el mundo tiene derecho del que hablaba Warhol su modo de vida y nosotros, pobres mortales, lo permitimos y hasta aplaudimos con gusto porque cumplen una función social: que nos sintamos mejor con nosotros mismos. Que las horas de trabajo no parezcan tantas, el sueldo no parezca tan pequeño, el piso no parezca tan sucio y el fin de semana en la playa unas vacaciones en Bora Bora. Porque no somos ellos y con eso, por ahora, ya está bien.
No están todos los que son pero, sin duda, son todos los que están.

lunes, 16 de julio de 2007

... cielito al pie del cañón...

Aquí estoy escribiendo de nuevo un solitario y anodino "hola a todos" con 67 segundos en el contador del ciber y tras un mes agotador y maravilloso. Pues eso. Hola a todos.

lunes, 2 de julio de 2007

martes, 12 de junio de 2007

Cuatro generaciones

Somos ya de Ortegas, mi familia materna, viviendo al mismo tiempo. No voy a decir mucho más de mi familia, aunque si me pusiera a hacerlo podría rellenar páginas y páginas. Somos muchos y no nos vemos demasiado pero, aunque haya clases, los quiero. Esta foto me encanta. Es mi abuela con mi primo-sobrino Javier (que siempre será primo a secas), uno de los benjamines. 94 y 1 año, respectivamente.

lunes, 11 de junio de 2007

Otra recomendación…

Si alguien que aterriza por aquí no lo ha hecho aun, hay que leer “Diez negritos”. Además de ser un clásico y un básico de la literatura universal, es entretenido, fácil de leer y con su punto de misterio que te engancha desde el principio. Si alguien no está haciendo cábalas sobre quien es el asesino en la página 10, le devuelvo el dinero.

miércoles, 6 de junio de 2007

La dolce vita

No necesito ser Anita Ekberg ni bañarme en la Fontana de Trevi. Vivo rodeada de la más pura opulencia. Me siento frente a San Juan de la Cruz a esperar a mi amiga Elena que me invita a comer a su casa. Justo detrás del banco hay un árbol frondoso pero yo estoy sentada al sol, que hoy calienta bastante, lo cual agradezco. A mi izquierda la sala Santo Domingo, con su pequeño y bucólico jardín en tres alturas. No me lo puedo creer pero estoy en el centro de una ciudad y oigo cantar a los pájaros que andan por aquí. Un poco más adelante, veo el imponente remate cuadrangular de la cúpula de los dominicos. Enfrente, detrás de San Juan, unas casitas bajas que desprenden muchas vidas pasadas dentro de sus paredes, de piedra de Villamayor, por supuesto. Como todo. Pasa un mini azul descapotable por la estrecha calzada que queda entre la estatua y las casas. A la derecha se ve limpiamente la muralla y, levantando un poco la vista, la maravillosa Catedral Nueva y su torre. Llega Elena, me levanto y nos vamos. Vivir en Salamanca es un lujo al alcance de cualquiera.

lunes, 4 de junio de 2007

Me quedo muerta…

El número total de partículas que hay en el universo es de diez elevado a ochenta. El número de partidas de ajedrez diferentes es de diez elevado a ciento veinte, inmensamente mayor que el número total de partículas de universo. No doy crédito…



jueves, 31 de mayo de 2007

Los destripadores

Pero de finales de películas, no los sucesores de Jack. Los spoilers (véase enlace para etimología y significado) de hoy es lo que toda la vida se ha venido llamando aguafiestas o, directamente, listillo o tonto del culo. Son los personajillos que todos tenemos o hemos tenido como amigos y que recordamos por sentencias como "Bruce Willis está muerto toda la película". Ea, pues esos. Por lo visto se están convirtiendo en cibertribu urbana con cierto componente friki-geek y tienen hasta una camiseta con la que de un simple vistazo destrozan los finales de filmes ya clásicos a los inocentes que aún no las han visto. Quizá me estoy convirtiendo en uno de ellos con el hecho de reproducir aquí el dibujo de la camiseta así que NO SIGÁIS LEYENDO si no queréis correr peligro de destripamiento. (¡sí, sí, claro! Basta que lo diga para que tengáis más ganas de verla). Si a alguien le fastidia alguna película es porque, chicos, ¡¡hay que ver más cine!!




martes, 29 de mayo de 2007

Protege tu imagen, tu integridad es muy importante...

Hay tantas cosas que me gustaría comentar aquí que ya me pierdo. Para darle un toque de frikismo al asunto diré que me estoy partiendo de risa con el ya conocidísimo y firme candidato a canción del verano "Ponte el cinturón". Lo mejor no es que la mujer se presentara con toda su buena voluntad, su falta absoluta de vergüenza y oído y sus evidentes problemas psicológicos al casting de Factor X, que el jurado se mofase de ella y que lo pusieran en la tele para que todos nos riéramos. ¡Lo mejor es que ya lleva más de 630.000 visitas (hay comentarios al vídeo como el de "Te queremos, loca" con el que por poco me muero de risa) y que hay una versión reggeaton remix, una con los Teletubbies y otra techno! Y tiene una especie de club de fans con los que la propia artista se comunica, y todo.
En este país somos así... A cabrones, crueles y rápidos con el humor fácil no nos gana nadie. ¿Estará Silvia Padilla, que así se llama a creadora del temazo, sacando algún provecho de todo esto?

lunes, 28 de mayo de 2007

La ciencia es nuestra amiga

Navegando por las procelosas aguas (estas dos palabras juntas me chiflan) de internet me estoy encontrando con un montón de webs y blogs increíbles sobre ciencia. Me estoy quedando flipada. Son entretenidísimos, instructivos, amenos... Eso sí, de artículos bastante extensos. Cuánto tenemos aun que aprender los de letras a difundir nuestros conocimientos. La ciencia y los que se dedican a ella hace ya mucho que se dieron cuenta de que no eran precisamente populares y se empeñaron en la tarea de darse a conocer y, mejor aún, a entender. ¿Qué hay más aburrido que un museo de Antropología? Y mira que me escuece, porque es una disciplina que me me gusta mucho... Y ahí tenemos, por ejemplo, la Ciudad de las Artes y las Ciencias de Valencia, con su Museo Príncipe Felipe a la cabeza en el que te puedes tirar todo el día toqueteando artilugios, viendo y haciendo experimentos y, en fin, aprendiendo si es que pretendes aprender cuando entras por la puerta.


















De las cosas que me he encontrado las que más me gustan han sido Historias de la Ciencia, Fogonazos y lo que se supone que es un clásico para mí desconocido: CPI ("Curioso pero inútil"). Son el son ganador y los finalistas de los premios "20 minutos" de blogs de Ciencia y Medioambiente. Me encata también Ciencia de bolsillo. Si os tira más la Paleontología -lo de los dinosaurios, vaya- os recomiendo el paleofreak. Inicia su blog con la grandísima frase "Yo no tuve infancia, tuve prehistoria".

domingo, 27 de mayo de 2007

Si algo me da miedo de este blog...

... o de cualquier otro, sea de la temática que sea, es la absoluta vulnerabilidad en la que, en este caso a mí, te deja. Y quizá por eso noto cierta neutralidad y, en general, poca personalidad, poca alma de quien escribe, en los blogs que voy mirando. Muchas veces creo que se intenta superar eso con un léxico rimbombante, una gramática rebuscada o incluso fotografías espectaculares pero, aceptémoslo, es una temeridad atreverse a crear un universo en el que te vuelques del todo y cualquiera pueda entrar, eso que se llama blog. Para no engañar a nadie diré desde ya que es esa una posibilidad que a mí, personalmente, me acojona. Jamás contaría mi vida, milagros y miserias a alguien que acabara de conocer y por eso tampoco lo haré aquí, a la vista de millones de potenciales lectores (¡que horror!). Es decir, que si un día estoy fatal, con la sensación de que el mundo se me cae encima y llorando como una magdalena por las esquinas -cosa que (¡¡atención!! ¡¡dato intimo y personal gratuito!!) no pasa casi nunca- no vendré a escribirlo en esta ventanita.
Yo nunca (un nunca en negrita, subrayado y al 72) digo todo lo que pienso. Ni sería capaz de verbalizar todos mis pensamientos, ni tendría horas del día suficientes, ni nadie me pide que lo haga (también intento no opinar con ligereza o si no me preguntan) ni, sinceramente, creo que fuera muy productivo para mi vida social. No digo todo lo que pienso pero hago algo mucho más importante: pienso todo lo que digo.
Esa es una de mis filosofías de vida y también será la de este blog: no está todo lo que es pero ES (eso seguro) todo lo que está.

viernes, 25 de mayo de 2007

Acertijo

¿Os gustan estos juegos? A mí sí. Están en franca decadencia y su presencia en las revistas de crucigramas que la gente lleva a la playa es cada vez menor. Lástima. Éste dicen que lo inventó Einstein pero yo no lo creo. Sólo hay que rellenar las casillas con la información que se da en las frases y contestar la pregunta. Os lo dejo para que penséis un poco.

- El británico vive en la casa roja
- Las mascotas del sueco son perros
- El danés bebe té
- La casa verde esta a la izquierda de la casa blanca
- El propietario de la casa verde bebe café
- La persona que fuma Pall Mall tiene pájaros
- El propietario de la casa amarilla fuma Dunhill
- El hombre que vive en la casa central bebe leche
- El noruego vive en la primera casa
- El hombre que fuma Blends vive al lado el que tiene gatos
- El hombre que tiene caballos vive al lado el que fuma Dunhill
- El hombre que fuma Blue Masters bebe cerveza
- El alemán fuma Prince
- El noruego vive al lado de la casa azul
- El hombre que fuma Blends tiene un vecino que bebe agua

¿DÓNDE ESTÁ EL PEZ?

Sobra decir que es escucharé gustosa dudas, desesperaciones o autoconfirmaciones de inteligencia (si lo resolvéis).

lunes, 21 de mayo de 2007

Lápices

Quiero hacer público que he empezado una colección de lápices de merchadising. Sí. Es una colección como otra cualquiera, ¿no? Que al final entre unas cosas y otras al final hago viajes (no es que sea el baúl de la Piquer, pero algunos hago) de los que no me traigo como recuerdo sino un montón de fotos y algún que otro alimento perecedero que no se encuentra fácilmente en España. ¡Pero las cosas van a cambiar! De ahora en adelante no habrá tienda de museo u oficina de información turística que se me resista. Si venden un lápiz con el nombre del sitio, será mío. Es un recuerdo barato y está en todos sitios, y es que soy práctica hasta para coleccionar. También los acepto como regalo de sitios en los que no haya estado así que, ya sabéis, en vuestros próximos viajes por lo largo y ancho de este mundo acordaos de mí y, si me queréis, compradme un lápiz.

domingo, 20 de mayo de 2007

Lo que hay que aguantar

Uno de los muchos personajes televisivos que detesto es Ana García Siñeriz. No sólo por lo pava que es y porque vive feliz a al sombra de Boris Izaguirre o porque va de mujer y madre sufrida y trajadora cuando su familia y su marido tienen más dinero que Alemania y, de hecho, le alquilaron su casa a los Beckham cuando llegaron a España. Me crispa los nervios por todo eso ypor comentarios como el que el otro día le hizo a Marta Sánchez cuando fue de invitada a Channel: "Estás radiante a tus 40 y es estupendo que no te importe reconocer que te has hecho unos retoquitos que todas nos hacemos y que no todas aceptamos". Cariño, no hace falta que lo reconozcas: todas lo sabemos.






¡¡Y ojo a como la presentan en la web del programa!! "... sin duda, una de las presentadoras más cultas y elegantes de la pantalla..." Lo que hay que aguantar.

jueves, 17 de mayo de 2007

Un vistazo atrás... o adelante

Ayer terminé (no sin cierta pena, lo confieso) el master que me ha tenido entretenida y ocupada desde el 7 de noviembre. Ya no es como en el colegio cuando el verano era un abismo del que no sabías si saldrías porque tres meses de vacaciones eran una barrera temporal demasiado lejana como para imaginársela aunque, en realidad, sabrías que tus amigos a los que no veías en todo ese tiempo estarían allí de nuevo el 15 de septiembre. Ya no. Ahora no tengo certeza de casi nada, no sé qué estaré haciendo con mi vida el 15 de septiembre ni falta que me hace y sé que a mis compañeros los tengo a nueve números de distancia; concretamente, los que conforman sus números de teléfono. Llego al ciber a escribir algo sobre el elitismo y en el buzón de entrada me encuentro 115 alertas de google. ¿Quién dijo que el saber no ocupa lugar? Nada menos que cuatro páginas de mensajes sin leer. Los borro todos a sabiendas de que algo interesante me estaré perdiendo y me pongo a escribir esto. Soy consciente de que estoy de bajón momentáneo que durará, quizá, media hora. Pero me sigo queriendo. Y me quedo.

miércoles, 16 de mayo de 2007

El elitismo

Ahí van un par de reflexiones sobre la élite que encantaron a alguien que, como yo, es una elitista confesa sin pudor ni vergüenza y que ha tenido enfrentamiento con todos aquellos que osan hablar del elitismo en términos despectivos y convierten a esta palabra, -tan objetiva , imparcial y aséptica- como cualquier otra, en una reivindicación clasista trasnochada.
Hay dos maneras de acabar con la élite: matando a todos los que pertenecen a ella o apuntando a ella a todos los que no pertenecen”
“En general, ante una minoría cultural selecta hay que intentar que sea menos minoría, no menos culta ni menos selecta

Las he encontrado en un libro de aforismos y reflexiones de Jorge Wagensberg que se titula “A más cómo, menos por qué”. No creo que haya mucho que decir, ni de las frases ni del título, a nadie que no se lo esté planteando ya por sí mismo, tras leerlas.

lunes, 23 de abril de 2007

La venganza de don Mendo

Genial. Sencillamente brillante. La Venganza de don Mendo es una de las mejores obras de teatro de todos los tiempos. No lo digo yo, sino la gente que entiende. A mí me encanta leer teatro y adoro la sensación de reírme con cosas que leo, lo cual no pasa muy a menudo. Para muestra, un botón (es ésta una frase hecha que nunca entenderé):

“Y si te parece mal
aquí mesmo este puñal
nos dará muerte a los dos.
Primero lo hundiré en ti
y te daré muerte, ¡sí!
¡Lo juro por Belcebú!
Y luego tú misma, tú
hundes el acero en mí."

Lisboa

Os recomiendo un viaje a Lisboa. Está cerca, quizá por eso no había estado todavía, ya sabéis, la típica excusa mental de que como está a la vuelta de la esquina lado me puedo acercar cualquier fin de semana, que realmente luego nunca encuentras y siempre lo vas dejando para otro momento. Total, está ahí al lado.
En realidad este artículo nació mucho antes que el blog, como apuntes en mi cuaderno de pensar que rellené mientras esperaba el embarque en el aeropuerto. Que bohemia fui en ese momento. En medio de un aeropuerto internacional rodeada de hombres grises (pero sin cigarros, ya se sabe… smoking room) de la escudería Mercedes y yo en vaqueros y con las gafas de sol en a cabeza escribiendo en una libreta media ajada sentada en el suelo. Recuerdo que pensé que sería muy bonito poder hacer cuadernos de viaje al estilo de los británicos del XIX que recorrían el mundo buscando lo pintoresco y exótico. Fue una idea que descarté de plano porque el hecho de proponérmelo siquiera sería añadir un fracaso más a mi larga lista de “cosas que me gustaría hacer” (y que finalmente no hago). La idea es preciosa pero, para mi, imposible. Para realizarla debería tener paciencia (de la que no estoy sobrada) y suficiente tiempo en los lugares como para sentarte en una terraza, un parque o un banco de una plaza a escribir lo que ves y lo que sientes en ese instante. De esto tampoco suelo tener. Sobre todo porque no soy capaz de no intentar verlo todo y aprovechar al máximo el tiempo. Disfrutando y sin agobios, claro.
Algunas de las cosas más bonitas que he visto en mi vida entraron por mis ojos en esos 4 días. Otras me impresionaron por lo gigantesco, lo diferente o lo pintoresco. Otras me sobrecogieron. Pero todas me enseñaron algo de ese país y de su gente, que tan poco aprecio tiene a los españoles.

La ciudad entera respire esa decadencia tranquila, serena, asumida, de quien va perdiendo lo que tuvo sin darse mucha cuenta. No me interesó lo más mínimo la masa de bloques de 10 pisos del extrarradio, que de eso hay en todas partes. Más bien me entusiasmaron las mujeres que tienden la ropa en sus balcones de la Alfama o lo hombres de aspecto taíno que juegan a las cartas en la calle encima de una caja de cartón puesta del revés mientras otros compran en las tienditas de alrededor. Los abuelos que se sientan en las plazas a ver jugar a sus nietos a sus pies… El revoco se cae, las calles huelen a pis y no existe orden racional entre calles, plazas y escalinatas, pero la vida sigue.



Por supuesto, dejé cosas sin ver ni hacer. Dicen que debes hacerlo para poder volver y yo quiero regresar.



viernes, 20 de abril de 2007

Palabra de Isabel

La semana pasada la Preysler decía en "Hola", cuando le preguntaban por consejos para acertar con el vestuario en cualquier ocasión, algo así como "Para una tarde en barco, unos pantalones anchos". ¡¡Pero señora!! ¡Por favor! ¿Cuántas personas de este país pasan tardes en barcos? A parte de usted, claro...

viernes, 13 de abril de 2007

¡Ahora sí que sí!

Si este año España (o más bien, como he leído, el grupo Radio Televisión Española) no gana Eurovisión, nunca más tendremos nada que hacer. Supongo que las quinceañeras de media Europa se volverán locas con los chicos de Nash, igual que lo están las de media España. A mí la canción me gusta y la verdad es que estoy deseando bailarla en un pub o discoteca salmantino cualquiera. Los niños tienen su puntito: son monos pero no top models, bailan bien y cantan aceptablemente, incluso a capella y en directo (los escuché en "Ponte a prueba", programa que merece -y tendrá- un artículo a parte). La canción, que ya tengo en el mp3, es pegadiza y con frases intercaladas en inglés, un must; era mi favorita desde el minuto cero porque, sí, yo veía "Misión Eurovisión" antes de que lo cambiaran a los sábados por falta de audiencia. El 12 de mayo, salvo planazo mejor, estaré delante de la tele con palomitas.

Mafalda

Es uno de mis muchos (o pocos, según con quien se me compare) fetiches. No sólo eso. Me hace pensar, reflexionar, sintetiza muchos de mis pensamientos con un humor fino, inteligente e irónico, es fiel reflejo de las relaciones sociales y retrato de muchos tipos de personas. Me quito el sombrero. Ante Quino, por supuesto. Un filósofo de la vida que se metió a dibujante, para mi regocijo y el de otros muchos. El hermano de un amigo dijo una vez que "Mafalda es una superheroína. Su poder son las palabras." Le aplaudí. En mi cuaderno de pensar hay decenas de viñetas de Mafalda que me vienen perfectas al hilo de muchas ideas. Mi blog no va a ser menos. Por eso, y por ahora:



(No se ve muy bien pero es una de mis favoritas. La ultima viñeta dice: "Es que a mí se me valora cuando se me conoce interiormente". Grande)

jueves, 12 de abril de 2007

Me lo quitan de las manos...

¡Vaya chasco! Con mi sueldo de local leader de este verano quería, amén de pagarme el carnet del coche (que ya va siendo hora aunque ni me apetece ni tengo interés) costearme un lujo. Me gusta darme algún capricho caro de vez en cuando, normalmente en forma de maquillaje. Esta vez quería comprame un anillo de Cartier para lucirlo en unos dedos que, cuando llegue verano, tendrán unas uñas definitivamente largas, después de 23 años de intentos fallidos. Anillo, a lo mejor. Cartier: no. Estuve mirando modelos en su web y de cada uno debías solicitar información por separado, entre ella, claro está, el precio. Resultado: de 9 consultas 9 el más barato cuenta 1.080 euros. Conclusión: antes de 2008 hay un 95% de posibilidades de que en mi joyero no haya un Cartier. Las mismas de que mi álbum de fotos se vea incrementado con las de un nuevo viaje.
(Este es el de los 1.080. "Trinity",
el clásico por excelencia de la firma,
diseño de 1924 y joya de culto)

martes, 10 de abril de 2007

Es pedante y lo sé...

...pero no puedo remediar corregir a la gente que habla mal. De entre ellos los que más me sacan de quicio son los periodistas, puesto que no les puedo corregir en vivo y en directo. De entre las muchas incorrecciones con las que nos deleitan hay una que me crispa especialmente: la de sustituir alegre e impunemente "acontecimiento" por "evento". En mi línea de defender la lengua española como base de nuestra cultura no me resisto a dejar constancia de que "evento" es: "hecho imprevisto, o que puede acaecer"; mientras que "acontecimiento" se refiere a todo "hecho o suceso, especialmente cuando reviste cierta importancia". Todo evento es acontecimiento, pero no al contrario. Por tanto: ¡señores! Dejemos de llamar "evento" a los Oscar o los JJ.OO. ¿O es que las delegaciones de casi 200 países se van a congregar en Pekín el año que viene como quien no quiere la cosa, de forma inesperada?

lunes, 9 de abril de 2007

Para quien no lo conozca.

José Antonio Marina es, a mi juicio, junto a Vicente Verdú, Fernando Savater y otros que ya iré nombrando, una de las mentes más lúcidas del país y una referencia intelectual fundamental. Ayer comencé a leer un libro suyo titulado "Por qué soy cristiano" que, lejos de ser una apología del catolicismo ortodoxo o una llamada a la conversión, intenta explicar cómo la historia tienen reflejo en el presente y por qué somos lo que somos, principalmente en el terreno religioso a la par que indaga qué se puede hacer hoy con el autentico mensaje de Jesús y como debemos considerar al creador del cristianismo.
Si alguien tiene interés en el tema creo que es una lectura recomendable.
En el prólogo hay un párrafo que me impresionó por lo mucho que se parece a algunas de mis reflexiones en voz alta y que reproduzco aquí sin la autorización expresa del autor.
"Poner una etiqueta simplifica la realidad, la hace manejable y dócil (...) Pues bien, si ser cristiano quiere decir creer en un Jefe de Estado que tocado con la tiara bizantina dice desde su palacio vaticano que es infalible y prohibe el uso de la píldora anticonceptiva, o se entiende por ser cristiano emocionarse con la romería de la Virgen del Rocío o dejarse timar por los telepredicadores norteamericanos, que no cuenten conmigo"
Yo no soy anti-Iglesia (jerarquía). Mis críticas a la institución son más cariñosas y con ánimo renovador y modernizador desde dentro más que feroces y mordaces ataques pero, por lo demás, coincido con Marina.
A ver qué me depara el resto del libro...

Feas (¿o ya no?)

¿Por qué sólo van mujeres a Cambio Radical? ¿Es que no hay hombres feos? ¿Y por qué TODAS tienen novio, si son tan feas? ¿No eran los hombres los superficiales de esta historia? A mi que me lo expliquen...

Así soy yo...

Empezaré, como marcan los cánones de la buena educacion, con una presentación. Me llamo Pilar y siempre que me presento o me presentan a alguien digo ese nombre pero al final todo el mundo acaba llamándome Pili, que no es que no me guste, pero creo que un nombre tan pequeño no pega con un cuerpo tan grande.

Soy inteligente e interesante y me jode que a esto la gente apostille “y no tienes abuela”. Pues sí, señores, tengo dos abuelas maravillosas que también saben lo estupenda que soy. Soy muy consciente de mis bondades y mis maldades y no me importa hablar de ninguna de las dos pero hablo poco de lo que me duele porque, evidentemente, me hace daño y no me gusta sufrir por gusto. Hablo mucho porque, primero, me gusta y, segundo, porque creo que es, a priori, la mejor forma de transmitir en alguien que, como yo, carece por completo de aptitudes artísticas y que, por tanto, ni compone música, ni pinta cuadros, ni hace hermosas fotografías, ni escribe poesía, ni esculpe, ni talla ni nada de nada. Una vez que se me conoce se descubre que también transmito con gestos y muecas incluso más que con palabras, pero para eso hay que conocerme. Soy extrovertida y fuerte como instrumento de supervivencia. Pocas personas pueden hacerme daño pero los que pueden tienen la capacidad de hundirme. Sólo acepto las críticas de la gente que quiero y, de éstos, sólo a los que creo aptos para ello. Me río con facilidad y lloro con dificultad.

Me gusta cocinar, bailar, viajar (pero nunca sola), el cine, charlar de pegos o de intelectualidades según el día y la persona que tengo enfrente, las duchas con agua hirviendo y meterme en una cama con las sábanas recién puestas. Me gusta dedicar tiempo exclusivamente a pensar y creo que seré muy infeliz el día que no tenga tiempo de leer un rato antes de dormir. Tengo un afán casi obsesivo por aprender cosas nuevas y me aterroriza tener la certeza de que la vida no me dará para hacer todo cuanto quiero.

Creo en Dios. Creo en la libertad que toda persona tiene para pensar, decir, hacer y ser lo que quiera siempre que no le cause daño a otro. Creo que en el mundo hay más buenas personas que malas y que tengo la suerte de conocer a muchas. Creo, como Saint-Exupéry, que lo esencial es invisible a los ojos pero que lo visible es igualmente importante. Creo que ser de Córdoba es una de las pocas cosas importantes con las que vienes de serie.

No creo que las croquetas de mi madre sean las más ricas ni que mi padre sea el hombre más listo del mundo pero los quiero de verdad por lo que son y por lo que aun les queda por ser y crecer. Tampoco creo que haya que conocer a alguien desde antes de tener uso de razon para saber realmente quien es. No creo en los integrismos pero sí en la radicalidad. No creo en el destino, en la predestinacion ni en las medias naranjas.

He jugado a una video consola una única vez en mi vida y no tengo ningún interés en aumentar ese número (aunque ahorré de pequeña con mi hermano para comprarnos una gameboy y lo hicimos). No me llama la atención todo lo digital y tecnológico y no muero por un Audi A8 o por un Ferrari Modena (ni siquiera los reconocería si los viera por la calle) pero sí por un Armani. Aun no sé muy bien que es esto de los blogs ni cómo me va a ir en la aventura y reconozco que si no fuera por la insistencia de Javi ni siquiera estaría escribiendo esto. Escribo con abreviaturas y la gente flipa cuando descubre que me sé las letras de la práctica totalidad de las canciones de reggeaton.

Me cae peor que mal Fernando Alonso y, en general, todos aquellos a los que la sociedad encumbra y que son ídolos de masas porque sí. Hay miles de detalles que no soporto en las personas (obviamente, también en mi) pero adoro a todos los que tengo alrededor porque creo que sus virtudes superan con mucho sus defectos. Admiro a las personas hechas a sí mismas y a las que consiguen sus metas, sean cuales sean.

Mataría con mis manos a cualquiera que maltratara a un niño, un anciano o a cualquiera que no se pueda defender y hay pocas cosas que realmente no haría por una buena, o excelente, cantidad de dinero. Nunca sigo las cadenas ni reenvío los fowards por muy graciosos o muy anti-etarras que sean.

Soy todo esto… y algunas cosillas más. Pero nadie pretenderá que lo cuente todo en un blog, ¿verdad?